Act4Food Act4Change trabaja con los creativos de Kidlit4Climate…

Resulta que el viernes 18 de julio es el Día de la Gastronomía Sostenible de Naciones Unidas, y a la vez se celebra justo un mes tras el lanzamiento del movimiento mundial de la juventud Act4Food Act4Change.

En un mes, Act4Food Act4Change puede celebrar que haya logrado 1200 Compromisos llegados de países del mundo entero y que esté entrando en la fase siguiente en que expande su divulgación.

Puede que la gastronomía se considere como un arte culinario, que consiste en elegir, preparar e ingerir comida rica. Y ahora, la comida y el arte deben ir a la par y celebrar este hito y este día mundial.

Para que cundan la concienciación y el compromiso ante las cuestiones vitales que venimos encarando en cuanto a comida, nutrición y medioambiente se refiere, desde el día 18 de junio, Act4Food Act4Change coopera con Kidlit4Climate [ver en Twitter e Instagram] con vistas a lanzar un nuevo proyecto artístico y solidario para aquellos activistas que obran por la transformación de los sistemas alimentarios.

Act4Food Act4Change respalda GoodFood4All, que tiene puesta la mirada y el empeño en alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. A la vez viene eficazmente agrupando a una base de seguidores como son las organizaciones de jóvenes, por ejemplo WAGGGS (Asociación Mundial de las Muchachas Guías y las Guías Scouts), e YPARD (Jóvenes Profesionales para el Desarrollo de la Agricultura), organismos de la ONU como UNICEF (Fondo de Naciones Unidas para la infancia), la FAO (Organización para la Alimentación y la Agricultura) y la OMS (Organización Mundial de la Salud), y a ONGs como Accción contra el Hambre y Save The Children.

Act4Food Act4Change está en lo suyo, en llegar preparadísima a la Cumbre de Naciones Unidas sobre Sistemas Alimentarios de septiembre de 2021.

La comida es algo esencial. Quién lo puede negar… es la vida misma. Pero aquello que comemos, y de dónde viene, cómo ha sido producido, procesado, con qué propaganda, cómo se consume y se vende es igualmente importante.

A nuestros sistemas alimentarios se les puede achacar hasta un 30% de las emisiones de gas de efecto invernadero, o sea tienen casi el tercio de la responsabilidad del cambio climático. Pero hay más problemas asociados a los sistemas de alimentación. Se les puede también culpar de contribuir a la pérdida de biodiversidad, a la extinción de las especies animales, y a las enfermedades humanas. Casi tres mil millones de personas no pueden permitirse una dieta saludable, y para colmo muchos de los trabajadores del sector alimentario no pueden alimentarse correctamente.

“La comida sana, nutritiva y segura es un derecho humano, pero es un derecho que se le niega a millones de seres humanos, muy especialmente a niños y adolescentes. Darles el acceso a una comida sana e inculcarles comportamientos alimenticios saludables a los niños es crear una sociedad de personas más sanas física y mentalmente, donde el individuo puede perseguir las metas que se proponga. Los gobiernos deben intervenir para garantizar precios asequibles, la accesibilidad y la concienciación de su población respecto de la comida verdaderamente nutritiva. Deben intervenir en las escuelas y a la vez restringir las campañas publicitarias de comida basura y fomentar la producción de alimentos alternativos sanos. Somos jóvenes, pero es nuestra responsabilidad lograr que los gobiernos rindan cuentas, y no solo los gobiernos, sino también toda la industria alimentaria, y para ello hay que votar con nuestro monedero a favor de la buena comida”, dice Priya Prakash, una de las jóvenes líderes de Act4Food Act4Change basada en la India.

Cuando hace un mes se lanzó la campaña Act4Food Act4Change, uno de los objetivos principales era animar a la juventud en general y a nuestros jóvenes aliados especialmente a actuar individualmente y de modo colectivo hasta lograr convencer a quienes toman decisiones políticas que han de contribuir a la transformación del sistema alimentario. Act4Food Act4Change insta a los gobiernos, a la industria, las agencias de la ONU, a los jóvenes y a toda la humanidad a que se actúe rápida y rotundamente y se resuelvan los problemas que plantean los sistemas alimentarios, como son la desigualdad en el consumo y la distribución, la producción insostenible para el medioambiente, la prácticas productivas que dañan la salud humana y la salud del ecosistema.

Kidlit4Climate es el ingenioso concepto de Emma Reynolds, ilustradora basada en Manchester, que lanzó en 2019 para dar a conocer visual y potentemente que los artistas que publican libros para los niños expresan toda su solidaridad con los militantes juveniles en su lucha contra el cambio climático. Es ahora una amplia red de ilustradores de libros infantiles y son muchos los artistas que participan en estas campañas.

“También es importante que respaldemos a estos jóvenes activistas” dijo Emma Reynolds. “La comida es algo importante. El arte es importante. Luego es importante para mí que aquellos artistas que trabajan muy especialmente para lectores jóvenes expresen su solidaridad con la campaña de jóvenes Act4Food Act4Change, para que todos unidos mejoremos nuestro mundo”.

Este Nuevo concepto artístico anima a todos los creadores y especialmente a los que se dedican a la literatura infantil a participar y compartir en la red sus contribuciones con los hashtags #Act4Food y #Act4Change para ilustrar el activismo de los jóvenes que obran por el bienestar de la gente y el medioambiente. Solicitamos de los artistas que a través de sus obras celebren el activismo a favor de la buena alimentación. A continuación una lista de sugerencias para ellos: la comida sana, el cultivo y la pesca sostenibles, la propaganda de la comida saludable antes que la publicidad para vender comida basura, la mejora de las dietas en las escuelas, la lucha contra la deforestación por desarrollar una agricultura intensiva, o la valoración de los conocimientos alimenticios de las comunidades indígenas. Este llamado a nuevas contribuciones se mantendrá durante dos meses, hasta el 18 de agosto.